Los demonios cruzados fueron durante mucho tiempo despreciados y esclavizados por el resto de demonios, por considerarlos inferiores, pese a que esos mismos demonios se habían mezclado en su día con los humanos para adaptarse y no abandonar la tierra.

Eso fue así hasta que uno de esos demonios cruzados lideró una rebelión para cambiar las circunstancias. Ese demonio era ‘Jaldabaoth‘. Nació con la habilidad de cambiar a forma humana, algo que muchos de los suyos utilizaban para escapar de la esclavitud y vivir en el mundo humano, pero él quería algo diferente, parte ansiaba la liberación y la justicia, otra, el derramamiento de sangre y el caos de un combate desenfrenado.

Durante años, se libraron las ‘Guerras Demoníacas‘ entre demonios de un bando y el otro, y ‘Jaldabaoth‘ lideró cada una de las batallas como un ángel infernal caído del cielo para aplastar a sus enemigos. El conflicto llegó a tal magnitud que las huestes humanas unidas a otras razas de la superficie trataron de aplastar a ambos bandos.

Su apariencia atemorizaba a ambos bandos, su ala blanca y angelical y su ala negra y demoníaca, unido a sus ojos, uno rojo y uno negro, representaban el fondo de su alma, pues ‘Jaldabaoth‘, ‘Libertador de los Cruzados’ era justo e implacable en su moral.

Al final, reconociendo la supremacía de ‘Jaldabaoth‘, los tres bandos pactaron, los demonios cruzados fueron liberados y los humanos y demonios tuvieron una tregua, aunque temporal, porque esas cosas siempre se olvidan y las leyendas quedan en eso, leyendas.

Protegiendo la ‘Prueba del Caos’ espera esta leyenda viviente a alguien que equilibre su Orden con el ansia de Caos que no ha podido satisfacer durante mucho tiempo.